NIZA, Francia.- Un camión repleto de armas y granadas de mano subió a la acera durante dos kilómetros (1,2 millas) y embistió a una multitud que estaba reunida para ver el espectáculo de fuegos artificiales del Día de la Bastilla en la turística ciudad de Niza, en lo que autoridades y testigos describen como un ataque deliberado. Las autoridades señalan que al menos 80 personas murieron.
El fiscal de Niza, Jean-Michel Pretre dijo que los cuerpos quedaron tirados a lo largo del camino. Señaló que el incidente “cuenta con varios ingredientes de un ataque que nos permiten pensar que fue eso”.
El político de mayor rango del departamento de Alpes Marítimos, el cual comprende a Niza, dijo que el camión embistió a la multitud durante una distancia de dos kilómetros (1,2 millas) y dejó 80 muertos y 50 heridos. Muchas de las personas que quedaron sobre el suelo vestían pantaloncillos y ropa de verano.
Eric Ciotti dijo a la televisora BFM TV que la policía mató al conductor “luego de aparentemente intercambiar disparos”.
Sylvie Toffin, funcionaria de prensa de la prefectura local, dijo que el camión “impactó a varias personas durante un largo trayecto” por la acera cerca del Palacio del Mediterráneo de Niza, un edificio que da a la playa. Dijo que el incidente fue “un ataque”.
Wassim Bouhlel, un residente de Niza que habló con AP cerca del lugar, dijo que el camión embistió directamente a la multitud.
“Hubo una masacre en las calles”, detalló Bouhlel. “Había cuerpos por todos lados”.
El presidente del consejo regional de la provincia Alpes Côte d’Azur, que comprende Niza, dijo que el camión estaba repleto de armas y granadas. Christian Estrosi le dijo a BFM TV que “el conductor le disparó a la multitud, de acuerdo al policía que lo mató”.
Bouhlel dijo que vio a un hombre salir del camión con un arma y comenzar a disparar.
Imágenes que se transmiten en la prensa francesa muestran a los visitantes corriendo por sus vidas a lo largo de la Promenade des Anglais (Paseo de los Ingleses), el famoso malecón que lleva el nombre de los aristócratas ingleses que propusieron su construcción en el siglo XIX.
Videos muestran a hombres y mujeres _ una o dos empujando carriolas _ corriendo para alejarse del lugar. Y, en lo que parece ser evidencia de un tiroteo, fotografías muestran un camión con al menos media decena de impactos de bala en el parabrisas.
No quedó claro de inmediato quién sería responsable del ataque, pero Francia ha tenido un incremento reciente de ataques por parte de grupos yihadíes, incluyendo el Estado Islámico, que tiene sede en Irak y Siria.
El presidente Barack Obama condenó lo que dijo “parece ser un horrendo ataque terrorista”.
“Nuestros pensamientos y oraciones están con los familiares y seres queridos de las víctimas”, subrayó.
El embajador de Francia ante Naciones Unidas, Gerard Araud, definió los eventos como un “ataque terrorista”.
En una publicación en internet, el periodista de Nice Matin, Damien Allemand, quien estaba cerca del lugar, dijo que la exhibición de fuegos artificiales había terminado y la multitud se puso de pie para retirarse cuando escucharon el ruido y los gritos.
“Una fracción de segundo después, un enorme camión blanco conducía a enorme velocidad, girando el volante para atropellar al mayor número de gente posible”, relató. “Vi cuerpos volar como pinos de boliche a lo largo del trayecto. Escuché ruidos, gritos que jamás olvidaré”.
Imágenes gráficas describen una escena de terror a lo largo del malecón, con cuerpos despedazados por todo el asfalto, incluyendo algunos apilados sobre otros, mientras que las personas se desangraban por las calles o quedaban tendidos en formas imposibles.
“íPor favor! íAyuden a mi madre!” grita una persona en medio de una cacofonía de gritos y llanto. Una bicicleta rosada para niña se ve volteada a un costado del camino.
No se pudo verificar de inmediato el origen ni la autenticidad de las imágenes.
Kayla Repan, de Boca Ratón, Florida, estaba entre los cientos de personas reunidas en el malecón para ver los fuegos artificiales.
“Toda la ciudad corría. Me asusté muchísimo y corrí lejos del malecón”, relató. “Era un caos. Nos ocultamos en un restaurante y ahora nos pasamos a otro hotel”.
