Los senadores descalificaron las amenazas de Trump en migración y su decisión de terminar el Programa de Acción Diferida para los llegados en la Infancia (DACA).
FOTO: Hombres estudian un mapa de México en un centro deportivo donde los migrantes centroamericanos que viajan con la caravana anual de “Estaciones de la Cruz” acamparon en Matías Romero, estado de Oaxaca, México, el 4 de abril de 2018.
MÉXICO. El Senado mexicano le plantó ayer cara al presidente estadounidense, Donald Trump, y le exigió respeto ante lo que definió como una “irrespetuosa e insultante” conducta hacia México mostrada desde su etapa de candidato presidencial.
En un pronunciamiento aprobado de manera unánime, el Senado condenó las expresiones “infundadas y ofensivas sobre México y los mexicanos” del mandatario y le demandó el trato que requiere una relación “entre países vecinos, socios y aliados”.
Los senadores le exigieron respetar “al pueblo de México” y en su pronunciamiento le solicitaron al Gobierno mexicano suspender la cooperación bilateral en migración y delincuencia organizada mientras Trump “no se conduzca con civilidad y respeto”.
La Cámara Alta cuestionó de instrucción de Trump de militarizar la frontera con México y la calificó de “un agravio más” en una conducta que ha sido “no solamente irrespetuosa sino insultante” desde que era candidato presidencial.
Su conducta ha estado sustentada en “prejuicios y desinformación” y de manera frecuente ha recurrido “a la amenaza y el chantaje”, dijo la senadora Laura Rojas Hernández al leer el pronunciamiento ante el pleno senatorial.
Recordó que como candidato, Trump calificó de una manera generalizada de “violadores y criminales” a los mexicanos y sostuvo que México se había beneficiado de una manera ventajosa de la relación con EE.UU.
Como ejemplo de que los dos países se han beneficiado mutuamente, los senadores mexicanos subrayaron los cinco millones de empleos estadounidenses derivados del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y las inversiones mexicanas por más de 52.000 millones de dólares en 6.500 empresas de Estados Unidos que han dado empleo a más 120.000 personas.
Sostuvieron que Trump ha enviado de manera reiterada “mensajes de enemistad” a México, como su intención de construir un muro en la frontera y “su absurda pretensión” de que los mexicanos lo paguen, lo que no sucederá de ninguna manera, indicaron.
Sobre la renegociación del TLCAN, el gobierno de Trump ha desarrollado una estrategia contraria a la colaboración y la buena fe, que ha puesto en riesgo la continuidad y mejora de un acuerdo que por tres décadas ha beneficiado a ambas naciones, apuntaron.
Los senadores descalificaron las amenazas de Trump en migración y su decisión de terminar el Programa de Acción Diferida para los llegados en la Infancia (DACA), así como supeditar toda solución legislativa a su agenda migratoria, “condicionando así el futuro de millones de jóvenes”.
En su pronunciamiento los senadores resaltaron los últimos mensajes del mandatario estadounidense sobre la política migratoria y su orden de militarizar la frontera con México.
Dicha instrucción es la “última expresión de esta forma en que, desde su época como candidato a la Presidencia de Estados Unidos, el presidente Trump se ha conducido con nuestro país”, apostillaron.
El Senado hizo también un llamado urgente al Congreso estadounidense para que inste a Trump a encauzar las relaciones con México sobre las bases del respeto y la colaboración.
Los antecedentes del envío de la Guardia Nacional de Estados Unidos a la frontera se remontan a las decisiones de George W.Bush en 2006 y Barack Obama en 2010 con el envío de cientos de soldados en operaciones puntuales.
El Senado ha dejado en claro también que la relación con Estados Unidos es estratégica para los dos países con una multitud de temas de cuya adecuada atención depende la seguridad y la prosperidad de millones de personas en ambos lados de la frontera.
México y Estados Unidos comparten una frontera de más de 3.000 kilómetros con 58 puntos de entrada por los cuales cada día cruzan un millón de personas con documentos.
Más de 35 millones de personas de origen mexicano viven en Estados Unidos y un millón de estadounidenses lo hacen en México, resaltó el Senado.
No obstante esta relación, la forma en que Trump “se comportado es para el pueblo mexicano en su conjunto, y para quienes lo representamos en el Senado, inaceptable e intolerable”, apuntaron.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, aseguró que su gobierno esperará a que Estados Unidos aclare el “eventual” envío de fuerzas militares para dar una posición “con toda claridad”.